lunes, 22 de julio de 2013

Mr. Fahrenheits letzter Monat in Heidelberg

En una de mis últimas entradas, vengo a contar cómo está siendo el mes de Julio, que de hecho es uno de los mejores de toda mi estancia aquí.

El mes comenzó con la llamada "semana de Amanda"; la chiquilla cumplía años el día dos y me pidió que le organizara una semana en su honor. Así que, modestia aparta, me dediqué a preparar cosas para ella (aunque si bien es cierto que ese fin de semana había numerosas fiestas en la ciudad). 

Así que tras darle una pequeña sorpresa el lunes con un cupcake; el martes nos pasamos la tarde entera para hacer tartas que esa misma noche nos tomamos. 









El miércoles noche le organizamos una fiesta sorpresa en la cocina de la residencia, en la que, obviamente, nos lo pasamos genial.




Y por si la semana fuera poco, esa semana llegaron de sorpresa, al menos para mí, Migue y Laura, que habían dejado la ciudad unos meses atrás. No hace falta decir que salimos de fiesta para celebrarlo. 






También hemos ido a la piscina por primera vez, y ahora no hay quien nos saque de allí.


Y para finalizar la semana hicimos una barbacoa en el Neckar, ya que desde mediados de Junio no bajamos de las 25º. 




Sin embargo, con el fin de la semana no acabaron los eventos. El martes estuvimos por la noche en el Neckarwiese y después salimos de fiesta, y el miércoles fuimos a despedir a Migue y Laura, que volvían a España. La próxima vez que nos veamos será por aquellas tierras. Pero antes de que se fueran, nos dio tiempo a conocer Freiburg, que ya conté en mi anterior entrada. 






Fueron unos diez días fantásticos en los que nos lo pasamos de escándalo. Sin embargo, cuando se fueron las cosas se "normalizaron" un poquito, si es que se puede decir que algo es normal estando de Erasmus. Tuvimos una semana de exámenes, de la que hemos salido airosos, y vuelta a la celebración. Nos pasamos los días en la piscina y las noches de fiesta. 

Nos queda una semana, y diez días a los que más, para que volvamos a casa, pero, aunque tengamos que estar con bastante papeleo, estamos aprovechando el tiempo al máximo y dejando el listón bastante alto para los que vengan de Erasmus a Heidelberg el año que viene con un mes de Julio inolvidable.


Wir haben unsere Herzen in Heidelberg verloren. 

jueves, 11 de julio de 2013

Mr. Fahrenheit in Freibourg

En esta entrada vengo a contaros el que, con casi toda seguridad, sea el último viaje que haga estando de Erasmus, que a su vez ha sido el más improvisado: Freibourg. La semana pasada vinieron a visitarnos Laura y Migue, y ya que estaban aquí fuimos a conocer la entrada a la Selva Negra. 


La ciudad se encuentra a unas dos horas largas de Heidelberg, dentro de la misma región, y además es bastante bonita. 

Nos recordó muchísimo a Heidelberg, el mismo estilo en los edificios y en las casas, y las vistas que tenía de la Selva Negra eran impresionantes. Si bien es cierto que los cuatro nos quedamos con Heidelberg. 



En una de las vueltas que hicimos mientras visitábamos la ciudad nos topamos sin darnos cuenta con el río que cruza la ciudad, además de los famosos Bächle, los canales que cruzan la ciudad. 






También es bastante impresionante la catedral de la ciudad, que en cierto modo me recordó a la de Strassbourg. 





Y obviamente siempre hay tiempo para hacer un poco el ganso. 




Fue un día bastante intenso, a pesar de que no estuvimos mucho tiempo allí, pero lo suficiente para conocer la ciudad y pasar un gran día con amigos que regresaron. 

Auf wiederlesen!